
No hay prisa. No hay necesidad de brillar. No es necesario ser nadie salvo uno mismo (Virginia Woolf)
Hace muchos años me cautivó un concepto creado por una valenciana experta en oratoria llamada Maty Tchey: el arte de comunicar como un arquero de la palabra. A través de esta metáfora ella describía cómo, a pesar de llevar sobre nuestras espaldas un carcaj lleno de flechas que simbolizan los conocimientos que hemos ido acumulando a lo largo del tiempo, no siempre acertamos al disparar (comunicar) hacia un objetivo receptor.
En ese sentido, el estilo del arquero consistiría en saber disparar la flecha de nuestro mensaje para dar siempre en la diana: el corazón de nuestro receptor. ¿Por qué el corazón y no la mente? Porque todo lo que nos crea un impacto emocional queda registrado en la memoria. El objetivo, va más allá de comunicar: se trata de dejar huella. Y aunque el estilo del arquero se creó pensando en la oratoria, es perfectamente aplicable a la comunicación escrita.
No se trata sólo de comunicar algo. Se trata de saber elegir el momento, el lugar y la forma adecuada. Y esta manera de enfocar el acto de expresarse, no responde a una fría estrategia que busca la atención de un algoritmo. Responde a una comunicación que es producto de una reflexión previa. Para comunicar algo con eficacia, tienes que saber por qué lo haces, para quién y desde dónde. Si comunicas desde la mente, llegarás a la mente, si comunicas desde el corazón, llegarás al corazón. Y si comunicas desde el alma, apuntarás al cielo y la flecha será dirigida por el pulso infinito de la propia vida… y caerá justo donde sea necesaria.
Como redactora siempre he sido una rara avis porque mi formación y mi experiencia siempre han estado ligadas a dos campos antagónicos dentro de las ciencias de la información: periodismo y publicidad. Nunca ejercí ambas a la vez por una cuestión de ética y deontología profesional, pero el caso es que he transitado por ambas.
Durante mucho tiempo pensé que era una desventaja, un no terminar de estar definida entre mi vocación periodística que quiere mantenerse neutra y objetiva ante los hechos y mi otra yo, la impredecible creativa. Me costó bastantes quebraderos de cabeza darme cuenta de que lo que yo consideraba un hándicap era, posiblemente, mi mejor baza.
El hecho de haberme formado y haber trabajado en ambos campos, me ha dado con el tiempo una capacidad de síntesis y una versatilidad en la escritura tremendamente útiles en el mundo digital (y en la vida real). Por lo que decidí simplemente ponerme manos a la obra, hacer lo que sé hacer y compartirlo con el mundo, ofreciendo también mis servicios profesionales de manera independiente, que es de la única manera que sabemos trabajar las personas con alma felina.
Con ese espíritu nació La gata sobre el teclado, un blog personal que derivó en columna periodística y años más tarde en antología publicada por una editorial canaria. Actualmente sigue siendo mi espacio virtual y mi mejor carta de presentación.
Mi recorrido oficial
Soy Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Politécnica de Valencia, titulada en Metodología Didáctica, Oratoria y Locución Profesional, y formada en Kinesiología con la acreditación de la Escuela Burbank de California y el International Kinesiology College. (La kinesiología no tiene nada qué ver con la comunicación, pero mucho que ver con el autoconocimiento y con la gestión emocional, dos disciplinas impagables a la hora de proyectarse sobre el papel… y sobre la vida).
Nací en Canals (Valencia) pero residí en Canarias durante más de dos décadas, compaginando el trabajo periodístico con la redacción de contenidos digitales para diferentes instituciones públicas y privadas, y con mi vocación de escritora a través de mi blog, de mi columna en prensa escrita y de la publicación de cuentos y relatos.
Como periodista trabajé como responsable de prensa de la Confederación Provincial de Empresarios de Santa Cruz de Tenerife (CEOE Tenerife) y como redactora en el periódico ya extinto La Opinión de Tenerife, además de colaborar en diferentes emisoras de Radio y periódicos digitales. La Asociación de Artistas Canarios SGA me otorgó el Premio 'Periodista y Escritora destacada 2020'.
Como escritora soy autora del libro Alma, del cuento de Navidad La llave de Vulcano y de varios relatos entre los que destacaría Lilium Vesta, con el que quedé finalista en la III Edición del Concurso de relato corto "El Libro en Blanco", publicado por la Editorial Taoro en una antología de relatos titulada '31 historias para encontrarte', (2019).
Fui Columnista en el periódico LA OPINIÓN DE TENERIFE (2016/2018) y posteriormente en EL DÍA (2021/2023) y gestioné los contenidos de las redes sociales de la ONG Nuevo Futuro Tenerife desde 2020 hasta junio de 2025. En 2021 diseñé el Taller de Escritura Creativa para el proyecto La Casa Verde de dicha ONG. También fui durante un par de años blogger para LAVA - Chocolate de Canarias y realicé varios trabajos como copywriter para la compañía canaria de marketing 22GRADOS.
Actualmente, sigo ejerciendo como periodista freelance en Valencia realizando la investigación documental para publicación una conmemorativa de la empresa hispano suiza CASA DEL MAS - KÜSNACHT mientras sigo inmersa en nuevos retos formativos y literarios.